miércoles, 19 de marzo de 2014

Ancho es Budiño, querido Sancho.


Mañana de Domingo, Faro de Budiño; la última sesión fotográfica de la futura guía de escalada de autoprotección en Budiño... Según me comenta José Juan hoy ya está camino de la imprenta para las pruebas de edición.

Once de la mañana y el resto del día para escalar; el sol brilla en un cielo azul y José Juan me invita a que le acompañe a escalar "Polo Offwidth"... 

Ésta es mi visión de un viaje a lo "Ancho" 

Siempre que uno escucha la palabra Offwidth, mentalmente aparecen todo tipo de adjetivos depreciativos, que si sucia, arrastrada, angustiosa, guarra, dolorosa... Sirvan mis palabras para intentar hacer una apología en favor de el mundo que se abre más allá de donde los puños se empotran...

Contaré mi visión y mi experiencia desde el cabo de la cuerda, porque después de asegurar y "ver" (en la medida de que mi posición asegurando me lo permitía) si bien no iba engañado, viendo subir a José Juan me repetía a mí mismo: "Hay que pelearlo", "Éso no va a ser fácil"...

El reposo de "Polo Offwidth"

La vía tiene una primera sección hasta que llegas a un buen reposo... Empezar con las "alitas de pollo" y las "punta-talón" no me hacían sospechar lo que vendría luego... Bien es verdad que nunca me había fijado en la vía, con lo cual salvo lo que observé mientras aseguraba ( que ser no era mucho) iba a descubrirlo todo por mí... 

El reino de los números grandes

Después de la primera sección paro a tomar aire como paró José... A él no lo veo... solo veo una panza que se eleva ante mí y siento una plancha de granito tras de mí... Me voy empotrando hasta que tengo que clavar las rodillas ( gracias que José Villar me prestó unas rodilleras)... No hay presas de manos, las palmas hacia abajo haciendo presión... dividiendo mi cuerpo en segmentos de tensión que se van tensando y comprimiendo... Alguno de los camalots baja generoso hacia mí, otros tengo que ir a buscarlos adentrándome hacia "lo estrecho"... Mientras José Juan me anima, José Villar se cuelga de la cuerda y hace algunas fotos, también me da algunos consejos que intento aplicar ... Jadeo, bufo... Mi pecho no se expande más... no puede... 

La satisfacción de gozar el momento...

Mientras el agotamiento se manifiesta sólo puedo imaginarme el subir por ahí de primero, ése pensamiento me anima hasta que la fatiga me vence y claudico a un reposo colgando de la cuerda... 
No recuerdo tanto agotamiento y tal sensación de falta de aire, pero me encanta el verme ahí, centímetro a centímetro llegando hasta la reunión...


Cuando el offwidth comienza a relajar tumbándose... José me avisa de que sobre mi cabeza hay una presa... Una gran laja en la que entra la mano ... la agarro e inexplicablemente, mis piernas al sentirse libres de la tensión a la que por no sé cuanto tiempo han estado sometidas dicen que ya no se contraen más... y termino los últimos metros con una flojera de piernas que a penas me sostienen... 
Me siento en la reunión prometiéndome que un día subiré de primero por ahí... Creo que habrá pasado una hora, hora y poco... y a pesar de sólo poder disponer del domingo para escalar... me siento pleno y satisfecho... y aún no es la hora de comer...


En un panorama actual en el que la escalada sigue aventurándose como decía Edlinger "au bout des doigts"... Empotrarse, cerrojear... son palabras que pueden parecer arcaicas, pero siguen siendo actuales; no de forma "mainstream", no de forma "global"... Pero para gustos hay colores, y para colores flores...


Centímetro a centímetro

Seamos realistas, la escalada de fisuras no es cómoda; la propia Steph Davis recomienda para escalar fisuras el uso de esparadrapo e ibuprofeno... no es barata, el material requiere la paciencia, el tiempo y la experiencia para conseguirlo; (O muchos y buenos amigos, o un sueldo de esos que todos desearíamos tener)... requiere tiempo; la técnica requiere práctica, la progresión requiere afianzar lo adquirido, las maniobras... supone un compromiso, tan mental como físico... adrenalina y oxitocina borboteando por cada rincón del cuerpo...al mismo tiempo que, a veces, un sudor frío...es cualitativa, no cuantitativa, a diferencia de la escalada deportiva aquí el grado es secundario, no irrelevante pero secundario y como decía antes, requiere tiempo y dedicación no sólo física, si no también mental... Habrá días que tendrás que irte al bar, por que tu cabeza está en otro sitio y no logras traerla de vuelta... Y duele, para que mentir... el callo no llega por inspiración divina...

Por contra, la cantidad de sensaciones que produce es inigualable, bueno cada uno la puede igualar a lo que quiera pero si hay algo que caracteriza al ser humano es un insaciable apetito de eudaimonía, ése sentido de la plenitud que nos embarga cuando contemplamos por ejemplo; una puesta de sol... A esa plenitud me refiero, por eso creo que los humanos suben montañas, recorren el mundo y buscan el conocimiento... El tao, el nirvana... llamémosle como queramos... 

Mi recomendación... Pruébalo... y si no te gusta; pruébalo de nuevo... Si entonces no encuentras tu motivación para seguir, está claro que no es tu camino... Pero la montaña, los viajes, el cielo y el sol nunca los abandones... Y respeta el medio, la basura no baja sola, y no dejes que nadie sepa que pasaste por ahí... salvo por la fotos que hagas...

El domingo no terminó ahí, nos fuimos a la Canteira de Insuas a seguir practicando, por que es la forma de aprender... 

Siempre hay fuerzas para un poco más...


Eso sí cuando el cuerpo dijo no más... Al Campinas a hidratar... y a desear el regreso aún antes de marchar...

Hasta agotar las pilas...

Pronto estrenaremos guía, muy pronto tendremos nuestra pequeña biblia en la que organizar nuestros proyectos y planificar nuestras sesiones, ampliando nuestra mentalidad, mejorando nuestra técnica, amueblando nuestra cabeza y siempre siempre descubriendo que aún nos queda espacio para la eudaimonía...

Así que para aquellos amantes de las fisuras, y los locos de los cacharros, para los curiosos de las sensaciones de la vertical y para amantes de la escalada en general... Seguir en contacto... Algo está cambiando y como poco... Debéis de probarlo...

Un saludo

Post.data: Las agujetas del día siguiente fueron tantas que me hicieron recordar a un buen amigo que también me provocó muchas agujetas y al que echo de menos... Un saludo Luis Sancho, el camino que me queda empezó contigo...

  

miércoles, 12 de marzo de 2014

Faro de Budiño, entre el Ardor y la Magia

Después de lo que pareció el diluvio universal, la lluvia parece que nos da un respiro y por primera vez en tres meses el fin de semana se pronostica bueno... Atrás queda un Carnaval pasado por agua.
Las ganas de volver a escalar se avivan más si cabe con la información en las redes sociales; las fisuras de Faro de Budiño aparecerán en un reportaje de una revista de tirada nacional, un artículo avance-anuncio-publicidad del gran trabajo de la futura guía de escalada de autoprotección en Budiño; de manos de José Juan.


Portada de Desnivel.

Las ansias hacen que mientras la noche cae, yo ya esté de pie contemplando las luces de las Gándaras de Porriño bajo las estrellas y la luna creciente... Que ganas de que llegue el amanecer para volver a reencontrarme con José Juan, con Ruth, con Rubén y con Luisa; que ante el anuncio de buen tiempo no duda en coger carretera y manta desde Pamplona para disfrutar de su adorada Galicia y su querido Budiño. Si eso no es pasión...


Desayuno al sol

La espera se me hace larga pero placentera, disfrutando de un cielo despejado y de un sol tan cariñoso que cualquiera no lo saborearía como yo lo hice... Después de 90 días de gris...

Cuando llega José Juan nos preparamos para el plan del día que contempla algunas sesiones fotográficas para la futura guía y tiempos libres para hacer lo que más nos gusta que es disfrutar escalando, eso sí centrándonos en buscar y degustar la autoprotección... Buscando el compromiso y la filosofía que a muchos apasiona y a nosotros nos encanta.
 Cuando llega Ruth, de repente surge un plan, fruto según dice José Juan de las lecturas de Hans Florine y la escalada de velocidad; así pues la primera actividad del día será una escalada de velocidad, de coche a coche... Los ojos se me ponen como platos... Y a ello nos ponemos... Salir corriendo desde el parking hacia pie de vía me descoloca tanto como me ilusiona, y al mismo tiempo me impone respeto pues iremos los tres en una sola cuerda... Cuando termino el último largo sin coger aliento, calzándome las zapatillas a toda prisa y echando a correr hacia la cumbre y de ahí al parking me voy partiendo de risa al cruzarme con paseantes que se echan a un lado al ver a un energúmeno con el arnés lleno de friends corriendo escaleras abajo... El resultado final fue de 50 minutos, que por supuesto ha de rebajarse...

Las sensaciones de contemporizar el ritmo de escalada con el compañero, gestionar la gaza de cuerda y mantener el ritmo han sido increíbles... La sonrisa no se nos quita de la cara, todo lo contrario Luisa ya ha llegado y aún tenemos tiempo "libre".

Nos vamos a escalar de nuevo, José Juan quiere encadenar la versión "Carra Non-Bolts", escalar la vía "Carrapucheiriña" sin emplazamientos fijos. La "Carra" como se la llama normalmente es una fisura de dedos a la que normalmente se llega tras subir una placa y superar un pequeño resalte desde el que se accede a más de 20 metros de fisura de dedos que se protege con fisureros pequeños y microfriends; los últimos movimientos son sobre bidedos en la fisura que te llevan a la reunión... Pero "Carra Non-Bolts" accede al resalte desde un lateral autoprotegiéndose en su totalidad. Ardor, expo, compromiso o "apretar un poco el culo" son sinónimos de tener la cabeza bien fría y saborear la escalada no por los números, si no por las sensaciones, sabiendo bien lo que se hace...


Luisa en los metros finales de "Carrapucheiriña" ("Carra Non Bolts") 1ª femenina

José Juan hace la 1ª y Luisa la 1ª femenina. Sea cual sea la versión elegida, la "Carra" es un gustazo de vía que no baja de cinco estrellas y que proporciona multitud de satisfacciones y placeres a quienes la prueban.

Mientras Ruth no se queda atrás y añade a su libreta tan preciada y valorada un Pink point al "Crucigrama" con una calma y un estilo que cualquiera que la viera no podría menos que valorar lo hermoso que es escalar, sea en primera o en tercera persona... La nota discordante fue un friend que no quiso salir hasta que llegó el manitas... Dicen que el diablo sabe más por viejo que por diablo...


Ruth en "Crucigrama"

Tras un pequeño y rápido almuerzo nos organizamos para el "trabajo" del día que es sacar unas fotos a Chapas en el Offwidth variante de "Carballón"; colgados al sol del atardecer, mientras las cámaras obturan, y el sol acaricia antes de irse a dormir. Chapas y Toni suben "Carballón" y José Juan y Luisa una variante al último largo de "Coño del Moroño". El atardecer es mágico y la cena nos espera...



Luisa, fanatismo y pasión y muuuchos kilómetros entre pecho y espalda. Un sol



Despliegue mientras José Juan y Chapas escalan, Ruth reportera



José Juan en Variante L5 "Coño del Moroño"

 Una minifiesta sorpresa de cumpleaños espera a José Juan y recelebramos también el cumpleaños de Ruth y de Rubén... Chapas, Cris, Toni, Luis, Nuria... Superjugosa reunión y charlas que se alargan hasta bien entrada la noche.. La vida se enriquece con pequeñas cosas... Mañana será otro gran día...

El plan es levantarse con el sol y desayunar pronto para aprovechar al máximo el día...


El Brownie de Rubén... un pecado del cielo que llegó hasta el desayuno

Desayunamos y preparamos las cosas, el plan de la mañana está trazado, cargamos las mochilas y subimos hacia la cumbre para ir a la parte superior del sector Abruzzos
Y aquí es dónde me quedo sin palabras pues con la excusa de hilar una variante que une dos largos diferentes lo que vino me deja sin palabras. La vía se llama "Os pais"; y desde la segunda reunión asciende por una fisura ancha de manos que lleva a una travesía expuesta para enlazar con otra fisura de manos que se va tumbando hasta llegar a los últimos metros que van tumbando hasta llegar a la reunión... Ésta es la descripción física. La emocional es más complicada, la foto que Luisa nos hizo para mí refleja mucho más de lo que mi cabeza puede verbalizar.


En un guiño a otros tiempos pero a una misma filosofía, hemos quedado en escalar en pantalones blancos, "Old School", y allí me encuentro colgado de una reunión aérea, con el aire pesando bajo mis pies, los árboles allí abajo y una fisura en el camino hacia la reunión; asegurar a Jose Juan desde allí es un placer y un honor, pues engloba en sí mismo las palabras amigo, maestro y compañero. Cuando llega mi turno sólo intento poner mi mente en blanco, sentir la roca e ir dejándome fluir en la secuencia de movimientos, cerrojos y empotres que me elevan física y emocionalmente... Estoy allí y estoy a miles de kilómetros, estoy viviendo el momento y un sueño al mismo tiempo... No se puede medir en números algo que rebosa cada poro de la piel y cada sensación... Cuando llego a la reunión dudo de si desencordarme por miedo a elevarme hasta el cielo...


Sin palabras...

Flotando en una nube, me encamino hacia el sector Cumbre donde tenemos tarea que hacer en cuanto llegue Miguel Angelo, en la vía "Kikos", mientras Ruth y Rubén bajan al sector La Reina para hacer la vía que da nombre al sector. Ruth abre los largos 1 y 3 y cuando la veo llegar a la reunión rebosa alegría... más que de costumbre... Al igual que a otros que yo me sé, verla me produce cierta envidia... Por esa magia que tiene el descubrir y sentir el universo de emociones y vivencias que hace tanto tiempo que yo descubrí. Pero al mismo tiempo me enriquece con su "frescura" y sus ganas.

Colgados en la pared asistimos a un "trabajado" y emocionante encadene de Miguel Angelo de la "Kikos" con anécdota para recordar incluida, y risas, risas que duraron hasta la hora de la comida...



Miguel Angelo, "Aguantar, aguanta"

Terminadas las fotos nos reunimos en la cumbre, a la que algunos se han subido la empanada para comer mirando el paisaje y es entonces cuando mis tripas dicen que necesitan comer... Deben ser las 3 de la tarde y no hemos parado... Así que con toda la calma del mundo, rebosando oxitocina y mil sustancias más nos bajamos al parking donde nos preparamos una comida-merienda exquisita que completamos con charlas sobre el proyecto de la guía y sobre la filosofía, y sobre la vida... No hay prisa ninguna, y el cansancio nos dice que habiendo terminado las tareas marcadas, sólo nos queda disfrutar un poco más de la compañía antes de emprender el regreso a casa...

Me ha costado mucho poner todo esto en palabras y se me quedan tantas cosas por ahí que aún hoy sigo sintiendo y que quiero seguir sintiendo cada día... por eso en cuanto termine esta entrada iré ansioso a ver la previsión del tiempo, por que estoy deseando volver...a Vivir...a la roca... con amigos... Una y otra vez... una y otra vez...

Gracias... Por todo... Un placer